. Los terceros molares o muelas del juicio, son los últimos dientes en formarse, entre los 16 y los 22 años y están situadas al final de la boca, en la parte superior e inferior.
No todo el mundo tiene muelas del juicio ( agenesia ).
Normalmente, si hay espacio en boca, éstas erupcionan sin dificultad, y funcionan como cualquier otra pieza dentaria para masticar, el problema aparece cuando no hay espacio y quedan retenidas en la mandíbula y no erupcionan a través del tejido gingival; esto puede provocar pericornaritis, enfermedad periodontal, quistes, caries en etc...
En muchos casos es aconsejable la extracción de estas piezas dentales, ya que al continuar su erupción y no tener espacio, provocan presión sobre las piezas anteriores incurriendo en una mala alineación de los dientes cercanos.
El porcentaje de terceros molares impactados es de un 17% a un 65%.
Para la extracción de una muela del juicio, lo primero sería realizar una radiografía panorámica, para ver el estado y la disposición de nuestras muelas.
La intervención la lleva a cabo un cirujano con anestesia local.
Después de la extracción se pueden sentir molestias en la zona durante las primeras 24 horas, por eso el profesional, prescribirá antibióticos y/o analgésicos y antiinflamatorios.
Se debe extremar la limpieza de la zona donde haya sido extraída la pieza, para evitar complicaciones. Y por supuesto seguir todas las indicaciones que haya proporcionado el profesional dental.
No todo el mundo tiene muelas del juicio ( agenesia ).
Normalmente, si hay espacio en boca, éstas erupcionan sin dificultad, y funcionan como cualquier otra pieza dentaria para masticar, el problema aparece cuando no hay espacio y quedan retenidas en la mandíbula y no erupcionan a través del tejido gingival; esto puede provocar pericornaritis, enfermedad periodontal, quistes, caries en etc...
En muchos casos es aconsejable la extracción de estas piezas dentales, ya que al continuar su erupción y no tener espacio, provocan presión sobre las piezas anteriores incurriendo en una mala alineación de los dientes cercanos.
El porcentaje de terceros molares impactados es de un 17% a un 65%.
Para la extracción de una muela del juicio, lo primero sería realizar una radiografía panorámica, para ver el estado y la disposición de nuestras muelas.
La intervención la lleva a cabo un cirujano con anestesia local.
Después de la extracción se pueden sentir molestias en la zona durante las primeras 24 horas, por eso el profesional, prescribirá antibióticos y/o analgésicos y antiinflamatorios.
Se debe extremar la limpieza de la zona donde haya sido extraída la pieza, para evitar complicaciones. Y por supuesto seguir todas las indicaciones que haya proporcionado el profesional dental.
Fuente: Dentalcare.